Cómo evitar que tus labios se resequen
Cuando se trata de cambios en la temperatura y/o las estaciones del año, los labios son los primeros en sufrir las consecuencias. Nuestros labios se encuentran siempre expuestos al clima, así que se trata de algo que va más allá que la falta de cuidados o la dejadez.
![AUMENTO_LABIOS_ACIDO_HIALURONICO_FOTOS_CIRUGIA_PLASTICA_ESTETICA_MADRID_edited.j](https://static.wixstatic.com/media/55ced1_dab8ed502aca4afd817fcddde231340a.jpg/v1/fill/w_980,h_938,al_c,q_85,usm_0.66_1.00_0.01,enc_avif,quality_auto/55ced1_dab8ed502aca4afd817fcddde231340a.jpg)
#1 Bálsamo labial
Antes de lavarte el rostro aplica sobre tus labios un bálsamo labial humectante. Tu limpiador facial puede estar causando resequedad debido a la presencia de ingredientes como el ácido salicílico, que perturban el equilibrio de pH en la piel.
#2 Aceite de almendras
Utiliza aceite de almendras. Puedes aplicarlo todas las noches antes de dormir, contiene alta dosis de vitamina A y E.
#3 Pepino
Si tus labios están profundamente agrietados y te duelen, corta unas finas rebanadas de pepino y déjalo reposar por unos 10 minutos.
#4 Exfoliación
Exfolia tus labios (excepto si se encuentran lastimados como en el caso anterior). Una pasta casera de azúcar y miel es perfecta para este paso.
#5 ¡No lo hagas más!
Evita hábitos perjudícales como lamer los labios. Piensas que estas aportando humedad pero lo cierto es que tu saliva los estça resecando aún más.
#6 Labial con protector solar
Utiliza siempre que te encuentres en el exterior una barra de labios con protector solar que humecte y proteja la piel de tus labios de quemaduras.
#7 Bebe agua
Bebe agua, siempre y todo el tiempo. La hidratación desde el interior nos ayuda a luchar contra la resequedad en los labios.
Los labios agrietados y resecos no tienen por qué ser un dolor de cabeza para ti. Sigue estos sencillos consejos y verás cómo los cambios de clima dejan de significar un problema. No olvides dejarnos tus comentarios ¿Qué utilizas tú para evitar la resequedad en los labios?
Fuente: Katherine Betances